Submarino Titán: revelan el horror que vivieron los tripulantes un minuto antes de morir

El especialista e ingeniero en submarinos, José Luis Martín, realizó un estudio, en el que reveló el horror que vivió la tripulación del submarino Titán cuando descendió a las profundidades del Atlántico Norte para ver los restos del Titanic que se hundió en el año 1912.

El 18 de junio, el Titán se introdujo en el Atlántico para recorrer 3,800 metros de profundidad, por lo que, una 1 hora y media después el Titán dejó toda la comunicación que mantenía con la nave nodriza. En las labores de rescate, los guardacostas estadounidenses escucharon ruidos extraños que se creyeron eran mensajes de la tripulación de la nave Titán.

Días después, se informó que esos ruidos fuertes confirmarían el sonido de la implosión sufrida por el submarino Titán donde murieron los cinco pasajeros incluido el CEO de la compañía OceanGate, Stockton Rush, las investigaciones para saber qué causó el terrible accidente han comenzado a salir.

Según expertos en submarinos, los tripulantes del Titán podrían haberse dado cuenta de lo que iba a ocurrir en los últimos 48 segundos antes de la implosión, según declaró el ingeniero a la web NIUS. Mediante una reconstrucción de lo sucedido, José Luis Martín también llegó a la conclusión de que el Tintán se habría hundido de una forma determinada.

Los especialistas precisaron que el sumergible se habría hundido verticalmente y «sin algún tipo de control» durante al menos novecientos metros, una situación que llenó de terror a los 5 pasajeros que tal vez sabían que iban a morir. Según las investigaciones, el tiempo total que pasó el Titán mientras descendía en el Atlántico Norte fue de 71 segundos.

Según, a la horizontalidad con la que descendió, y según las hipótesis del ingeniero experto, la cápsula del Titán pudo sufrir un fallo eléctrico que le obligó a cambiar su posición, por lo que el sumergible «se quedó sin motor y sin propulsión y fue entonces cuando perdió la comunicación», dijo el experto.

La posición que se encontraba era de manera vertical del Titán, lo cual habría sido provocada por los 400 kilos que los tripulantes provocaron en la nave, de forma que todos los pasajeros quedaron «amontonados unos encima de otros», según el informe del ingeniero, quien añadió que el piloto del Titán «no pudo hacer funcionar la palanca de emergencia», por lo que tampoco tuvo posibilidad de maniobrar con los elementos de control y seguridad, por que estaban «averiados».

Las deducciones finales sobre lo que le ocurrió al submarino Titán fueron que «cuando cayó a las profundidades del océano, el casco resistente sufrió un repentino aumento de presión, el ‘empuje’ disminuyó y el sumergible Titán se hizo cada vez más pesado, explicó Martin.

En otras palabras, durante esos segundos, la tripulación del Titán habría estado «conscientes» de lo que ocurría: «En ese periodo de tiempo, son conscientes de todo y en total oscuridad».